Las ventas por el Día del Niño cayeron un 14,4% en comparación con el año pasado, según un informe reciente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
“Durante los últimos años, con el dólar oficial atrasado, los importadores ingresaron mucho producto. Hoy hay en el mercado juguete importado para 10 años. Está saturado de mercadería; y el 40% del total del mercado corresponde a juguetes truchos”, precisaron desde la Cámara Argentina de la Industria del Juguete.
Esta contracción, reflejo del deterioro en el poder adquisitivo de las familias, no solo impacta el mercado interno, sino que también profundiza la crisis en el comercio exterior de juguetes, exacerbando un problema ya existente: la saturación de productos importados en un mercado en declive.
En un escenario económico marcado por la inflación y la pérdida de poder adquisitivo, las familias argentinas redujeron significativamente sus gastos, afectando especialmente las compras de juguetes y productos relacionados con el Día del Niño.
Este año, a pesar de las promociones y descuentos ofrecidos por los comercios, el ticket promedio se redujo, lo que sugiere que los consumidores están priorizando productos más básicos y económicos. La contracción en las ventas no solo afecta a los comerciantes locales, sino que también repercute en la cadena de suministro y, en particular, en las importaciones.